Cien subametralladoras UZI de la Policía Nacional Civil, podrían estar en manos del crimen organizado.

Las armas fueron entregadas en marzo de 2013 pero hasta mayo no habían sido ingresadas en el inventario de la institución policial, según la Contraloría.

La Contraloría General de Cuentas (CGC) en su informe de la auditoría de 2014 practicada en el Ministerio de Gobernación, detalla que cien subametralladoras no fueron registradas en el libro de inventarios y fueron distribuidas sin controles.

El hallazgo corresponde a la auditoría del programa Servicios de Seguridad a las Personas y su Patrimonio, a cargo de la Dirección General de la Policía Nacional Civil. El informe cita “que la forma 1H No. 641596 Constancia de Ingreso a Almacén y a Inventario de fecha 31/03/2014, por el ingreso de 100 subametralladoras marca, UZI, modelo PRO, SMG, calibre 9X19mm, por un valor de Q1 millón 178 mil, no cuenta con las firmas de autorización y los sellos de los responsables”.

Sanciones administrativas

Por el descontrol del armamento en la Policía Nacional Civil, la Contraloría General de Cuentas impuso sanciones económicas de Q4 mil 708 a Claudia Eugenia Trinidad Barillas, jefa interina de la sección de inventarios; Q13 mil 518 a Olga Beatriz González Fuentes, jefa de la Unidad de Planificación Administrativa y Financiera, y al guardia del almacén, Edwin Antonio Lima Reyes, Q4 mil 708.