¿PNC seguridad o amenaza?

Varios agentes y mandos de la Policía Nacional Civil han sido detenidos en los últimos días, involucrados en varios hechos delictivos que van desde asaltos a mano armada a ciudadanos en operativos y, a persona que salen de agencias bancarias con considerables cantidades de dinero. Otros están involucrados en el robo de vehículos, trafico de drogas... 

Estructuras como éstas existen en lo interior de la PNC, formadas principalmente en la administración de Marlene Blanco Lapola y Rember Larios en el tiempo de la UNE. Con el actual gobierno, Mauricio López Bonilla y la anterior cúpula de la policía, continuaron encubriendo éstas organizaciones que podrían ser células del Cártel la "Charola", que supuestamente está conformada por más de 1000 miembros de la institución, entre mandos superiores, mandos medios y agentes, lo cual ya ha sido denunciado públicamente por un periódico, pero los guatemaltecos aún no vemos resultados. 

Otras acciones anómalas que los convierten en una amenaza para el ciudadano, son las detenciones ilegales. Es de investigarse si es una orden superior o es iniciativa de los elementos policiales, pero se han dado varios hechos en donde se detienen a personas equivocadas.

En uno de esos casos, dos jóvenes que viajaban a bordo de un vehículo, el cual colisiona con un microbús y al momento de caminar hacia un teléfono público, fueron interceptados, esposados y llevados a otro lugar en una autopatrulla, en donde se encontraban dos personas asesinadas.

Los policías al momento de hacer la consignación respectiva al Juez, describieron que al momento del ataque armado acudieron inmediatamente y que en una acción rápida de los uniformados, detuvieron a los responsables. Que descaro.

A pesar que estaban los testigos involucrados en la colisión, no fueron escuchados. Está el otro caso de Ciudad Peronia, donde recientemente fueron atacados tres buses. Los agentes aparecieron con un señor  detenido a quien culpaban de los atentados, por lo que la población se aglomeró y le propinaron una golpiza al detenido a quien intentaron linchar.

Según la versión de varias personas, este pobre señor que sorprendieron mal parado, no tenía nada que ver en el ataque. Mientras todo esto pasaba, los mareros risa y risa y celebrando los atentados.

Estas acciones anómalas y violatorias a las leyes y a los derechos humanos, podrían interpretarse: que se trata de contubernios entre los delincuentes y los uniformados. No les importa  responsabilizar a cualquiera para engañar al pueblo que son eficientes, causándole daños irreparables a los que son víctimas de éstos delincuentes uniformados. ¡Cuidado con los delincuentes policías!