Diputados cómplices de los delincuentes 

y gobiernos ineptos

¿Por qué digo esto? simple. La mayor parte de los mal llamados "padres de la patria", se involucran en una serie de hechos delictivos: Corrupción, ventas de plazas, tráfico de influencias y negocios sucios realizados bajo la mesa para la aprobación de leyes que beneficien a determinados sectores...

En el pequeño hermano país de El Salvador, se ve la buena voluntad de los parlamentarios para proteger a la población de la criminalidad que al igual que Guatemala, es azotado por varias estructuras del crimen organizado, principalmente las maras. 

Hace pocos meses aprobaron la ley en la que califican los actos criminales de los mareros, como actos terroristas y los jueces los juzgan como tal ¡¡¡Aplausos para esos diputados!!!

Por su parte, el gobierno central salvadoreño a través de sus fuerzas de seguridad —policía y ejército—, emprendieron una operación especial, en donde le dan persecución a esos criminales involucrados en asesinatos, atentados, secuestros, extorsiones, etc., con la finalidad de capturarlos vivos o muertos.

Por esa razón, toda esa porquería o lacra se viene a nuestro país para instalarse, organizarse, mezclarse con mareros chapines a quienes les dan nuevas ideas de como causarle más daño a la población, es el caso de las bombas instaladas en el transporte público...  

Juventud amenazada

Estos parásitos dañinos (mareros) son una amenaza latente para el futuro de Guatemala, porque los niños son el futuro del país y de la sociedad. Según información fidedigna, alrededor de 100 menores de edad se encuentran secuestrados por los mareros, quienes los retienen por la fuerza amenazados de muerte para obligarlos a consumir drogas y a participar en hechos criminales.

En todas las colonias en donde existen esos parásitos, se da el acoso constante en contra de los jóvenes que desean estudiar y ser personas de bien. Algunos son asesinados al rehusarse a integrase a esos grupos de drogadictos-criminales, mientras que otros, son llevados por la fuerza.

Pero nuestros diputados únicamente se preocupan en realizar negocios sucios en el Congrueso y continuar con los tránsfugas, velando por sus intereses personales. Mientras que el gobierno central, se ha dedicado a la aplicación de maquillaje a los males que aquejan a la sociedad y,  a contar cuentos, moralejas, cortar cintas...