Maras salvadoreñas y hondureñas se refugian en Guatemala
Cientos de pandilleros salvadoreños han ingresado a territorio guatemalteco por pasos no autorizados existentes a lo largo de la frontera y de esos, apenas 15 han sido detenidos por haber cometido asesinatos, extorsiones y atentados a guatemaltecos trabajadores.
Las operaciones de pandillas se incrementan cada vez más en los países del Triangulo Norte centroamericano, principalmente en Guatemala donde no existe un plan eficaz para enfrentar a esas mafias organizadas, conformadas por delincuentes jóvenes guatemaltecos, hondureños y salvadoreños.
Asesinos, expertos en atentados se internan en territorio guatemalteco para entrenar a pandilleros nacionales, se establecen en zonas rojas y extienden su operatividad, aprovechando que en Guatemala no existen leyes drásticas para combatirlos y una policía con mandos sin experiencia y sin vocación.
Estas estructuras utilizan las guías telefónicas para amenazar, extorsionar y atentar en contra de la vida de los comerciantes o dueños de pequeños negocios. A lo largo y ancho de los países del Triangulo Norte, secuestran a migrantes que viajan hacia EE.UU. y luego exigen rescate a sus familiares.
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