"Yo trabajo con mucha comodidad con la CICIG y tengo muy buena relación con el comisionado Iván Velásquez. Si el Presidente decide que siga, yo muy bien sigo trabajando. Recordemos que fue Guatemala la que pidió a la ONU instalar a la CICIG. Respetaré la decisión del Presidente".
Lamentablemente, las autoridades guatemaltecas no gozan de credibilidad ante la población, porque se han visto injusticias, violaciones al debido proceso de las leyes, a los derechos humanos y, la corrupción que se refleja en los organizamos del estado, lo cual pone en peligro la vida y los derechos de todos los guatemaltecos.
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